Palabras de espiritualidad

Destruyendo el pecado con el arrepentimiento sincero

    • Foto: Oana Nechifor

      Foto: Oana Nechifor

Si no destruyes el pecado por medio de un arrepentimiento sincero, éste se irá fortaleciendo en tu interior, atrayéndote fatalmente a lo profundo del mar de la maldad.

En vez de paralizarte por la desesperanza, mejor prepara tu alma para el esfuerzo ascético, extrayendo de esta caída una lección de humildad y un aviso para no volver a pisar esos terrenos resbaladizos. Si no destruyes el pecado por medio de un arrepentimiento sincero, éste se irá fortaleciendo en tu interior, atrayéndote fatalmente a lo profundo del mar de la maldad. Entonces, el pecado te dominará y deberás empezar nuevamente desde cero, desde tu primera lucha. Sin embargo, sólo Dios sabe si esto volverá a ser posible. Puede que, confiándote al pecado, sobrepases los límites de tu conversión y no puedas encontrar ya una sola verdad que te sacuda y te atraviese el corazón. Y talvez no recibas otra vez la gracia.

Con esto, estarás siendo incluido entre los que van a sufrir del castigo eterno.

(Traducido de: Sfântul Teofan Zăvorâtul, Calea spre mântuire, Editura Bunavestire, Bacău, 1999, p. 176)