Palabras de espiritualidad

En todo lo que hagan, pongan el Nombre de Jesús como cimiento, columna y protección

    • Foto: Florentina Mardari

      Foto: Florentina Mardari

Esfuércense al orar, hijos míos, y encontrarán un bien inmenso, restauración y descanso espiritual.

Hijos míos, acuérdense siempre de Jesús, para recibir el remedio adecuado a cada uno de sus problemas. ¿Haya algo que les entristezca? Llamándolo, recibirán consuelo y luz. ¿Se trata de alguna aflicción? Llamen a Jesús y sentirán un lenitivo cubriéndoles el corazón. ¿Sienten que el desaliento les gana? No olviden poner toda su esperanza en Jesús, y su alma se llenará de fuerza y valor. ¿Les atacan los pensamientos carnales, incitándolos a los placeres de los sentidos? Tomen el fuego purificador del Nombre de Jesús y con Él conseguirán disipar las tentaciones.

¿Hay algún asunto de este mundo que les preocupe? Digan: “Ilumíname, Jesús mío, para saber cómo proceder en esta situación. Ayúdame a resolverla de acuerdo a Tu santa voluntad”, y verán que se llenarán de paz y esperanza. En todo lo que hagan, pongan el Nombre de Jesús como cimiento, columna y protección, y dejen de temerle al enemigo. Al contrario, cuando hacemos algo sin Jesús, sí que debemos temer. No esperen curarse si antes no toman el medicamento necesario; si no, lo que aparecerá será la putrefacción.

Esfuércense al orar, hijos míos, y encontrarán un bien inmenso, restauración y descanso espiritual.

(Traducido de: Comori duhovniceşti din Sfântul Munte Athos – Culese din scrisorile şi omiliile Avvei Efrem, Editura Bunavestire, 2001, p. 280)