Palabras de espiritualidad

Para conservar la libertad de nuestra voluntad

    • Foto: Oana Nechifor

      Foto: Oana Nechifor

El esclavo del pecado pierde su dignidad de hombre y el rango de hijo de Dios.

Si el hombre sigue en su vida la voz de la razón, así como los sentimientos del amor y las exigencias de su propia conciencia, actuará como un ser racional y libre, y mientras más haga esto, más se fortalecerá y se desarrollará en su ser la libertad de su voluntad.

Por el contrario, si el hombre prefiere lo que es malo, pernicioso y pecador, cada día que pase perderá un poco más de su libre albedrío, convirtiéndose en esclavo del pecado y las pasiones. Y el esclavo del pecado pierde su dignidad de hombre y el rango de hijo de Dios.

(Traducido de: Sfântul Luca al CrimeeiLa porțile Postului Mare, Editura Biserica Ortodoxă, București, 2004, p. 31)