Palabras de espiritualidad

“¿Qué consejero te ha instruido?”

    • Foto: Oana Nechifor

      Foto: Oana Nechifor

Translation and adaptation:

Cuando tengamos que enfrentar las tentaciones y pruebas, aconsejémonos con nuestra muerte, y aunque sea la muerte, nos orientará a la vida.

Si el hombre se aconsejara con la muerte, cada día, a cada hora, crecería mucho espiritualmente y llegaría a ser la imagen de la perfección, y su ejemplo de vida sería de provecho para todos, llevándoles a preguntarse: “¿Qué consejero te ha instruido?” (Isaías, 40, 13; Romanos 2, 13; 2, 24; I Corintios 2, 16).

Entonces, antes de hacer cualquier cosa en nuestra vida, preguntémosle a nuestra muerte: «Sabemos que en verdad eres sierva de la justicia divina, y nosotros no somos más que unos simples mortales sometidos a tus disposiciones, porque también a nosotros se nos dijo eso que escucharon nuestros ancestros: “Ciertamente morirán” (Génesis 2, 17). Sabemos que no favoreces a nadie y que todo lo haces obedeciendo a Dios. Así, queremos que seas nuestro consejero en esta vida, para no ser castigados por nuestro Buen Dios, por culpa de nuestros incontables pecados, y paa que no nos reprendas el día en que tengamos que partir de esta vida».

Teniendo esto en mente, cuando tengamos que enfrentar las tentaciones y pruebas, aconsejémonos con nuestra muerte, y aunque sea la muerte, nos orientará a la vida. Cuando nos venga algún pensamiento de odio o venganza hacia alguien, preguntémosle a la muerte: «¿Qué dices, muerte, es bueno esto que estoy pensando?». Y ella nos responderá: «¡Ni se te ocurra! Acuérdate de lo que dice la Santa Escritura: “El que odia a su hermano es un homicida” (I Juan 3, 15). Ahora escucha lo que dice Dios nuestro Señor: “Yo vengo tu venganza. Yo venceré (Jeremías 51, 36; 11, 20). Si odias a tu hermano y quieres vengarte de él, yo vendré a ti trayendo una orden de Dios y te llevaré al infierno, junto a los asesinos (Apocalipsis 22, 15)»

(Traducido de: Arhimandrit Cleopa Ilie, Urcuş spre înviere, Editura Mitropolia Moldovei şi Bucovinei, p. 332)



 

Leer otros artículos sobre el tema: