Palabras de espiritualidad

Palabras de espiritualidad

La Gracia de Dios y el corazón del hombre

El hombre de corazón petrificado, del cual se ha apartado el consuelo divino, vive un permanente tormento que no halla consuelo.
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Palabras de espiritualidad

La devoción perdida por el mundo

Los hombres han dejado de vivir con espiritualidad. Quieren explicarse todo según los criterios de la lógica del mundo, y con esto apartan la Gracia Divina.
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Lo que obtenemos con la intercesión de la Virgen María

Por las oraciones de la Madre del Señor, obtendremos la misericordia divina: en este mundo, a la hora de nuestra muerte, y en el Día del Juicio.
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La fe en Dios mata la codicia

El hombre empieza a entender el sinsentido de la acumulación de bienes y de la búsqueda del bienestar material, porque pone toda su esperanza en Dios.
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Nos falta amor, nos sobra envidia

Tenemos que hacer lo posible por librarnos de esta inclinación, porque el amor verdadero no busca lo suyo, sino el bien del otro.
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La mano creadora de Dios

La fe completa los vacíos de la razón y la convence para que reonozca esto: que Dios puede hacer cualquier cosa, porque es Todopoderoso y Omnipotente.
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Una buena táctica de la lucha espiritual

Por medio del ayuno y las vigilias, el demonio se ve desarmado y empieza a batir en retirada.
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¡No temas ser demasiado precavido ante los engaños del maligno!

Sería bueno que también tú pudieras comprender que se trata más bien de engaños, y que incluso si, en el caso extremo, vinieran de la Gracia, Dios no se enojaría contigo por rechazarlos o por no...
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La importancia de guardar el equilibrio en nuestros pensamientos

“Saber cuidar la mente es el camino y la puerta de toda virtud y de toda obra buena ante Dios”.
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Centrar la mente en nuestras plegarias

Es necesario que hagamos un esfuerzo consciente para recogernos interiormente y prestar atención a las palabras de la Oración.
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El cuidado de la mente

Es imposible cuidar la mente de malos pensamientos y de figuraciones perversas, si no nos acostumbramos a practicar la oración incesante.
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El Señor es Quien nos ayuda a crecer en la fe

Le pedimos a Dios que nos ayude a crecer en la fe, no para que seamos capaces de obrar milagros, sino para amarlo a Él mucho más.
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La fuerza que respalda nuestra oración

La fe es la fuerza, la vida del corazón; la falta de fe es su debilidad y, en sí misma, su muerte.
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Reconociendo la fe verdadera

La fe sin obras no es real. No es posible que el verdadero creyente no traslade su amor a todo lo que hace.
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La naturaleza de la fe en Dios

La fe crece y se desarrolla con la voluntad del hombre, “con la colaboración y labor conjunta con Dios”.
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De la fe y el conocimiento de Dios

Solamente Dios, con Su piedad, quiso apartar ese velo y mostrarles a los hombres la dulce verdad.
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Palabras de espiritualidad

Dios ama la sencillez del hombre

El más agradable a los ojos de Dios es aquel que ha llegado al tercer peldaño de la humildad: el que se considere a sí mismo el último de todos y se someta incluso a los que están más abajo que él.
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¿Cómo ahuyentar al maligno?

Todo consiste en la táctica espiritual, en la estrategia que usamos en nuestra lucha contra el demonio.
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Comulgar sin temor a ser condenados

Cuando nos acercamos a este sacramento, en primer lugar, habiéndonos arrepentido sinceramente y confesado con humildad nuestras faltas, decididos a no volver a cometerlas.
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El amor une a nuestro ser entero

El amor aparta el intelecto como una figuración inútil. Pero, en cambio, une tres rayos a la vez: la mente, el corazón y el alma, y los enciende en una sola llama. 
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