¿Cómo saber la procedencia de nuestros sueños?
“Cree solamente en esos sueños que te anuncian el juicio y el castigo eterno. Pero, si son sueños que te provocan desesperanza, entonces es el demonio quien te los envía”.
San Juan Climaco nos aconseja y exhorta: “Cree solamente en esos sueños que te anuncian el juicio y el castigo eterno. Pero, si son sueños que te provocan desesperanza, entonces es el demonio quien te los envía”. Repitiendo, los sueños que nos manda el maligno nos aterrorizan y nos llevan a la desesperanza. Los sueños espirituales (únicos que son legítimos) nos muestran juicio y castigo. Y, al despertar, nos sentimos intranquilos, preocupados, pero positivamente, pensando en nuestra salvación. Los sueños meramente humanos ni nos aterrorizan, ni nos llevan a la desesperanza, ni nos alientan a arrepentirnos para que podamos alcanzar la salvación.
(Traducido de: Arhimandrit Vasilios Bacoiannis, Înfruntând diavolul și vrăjitoria, Editura Cartea Ortodoxă, Galați, 2004, p.7)