¿Cómo vencer los celos?
Cuando el esposo sea culpable de algo, véanlo como si de un enfermo se tratara: demuéstrenle mucho más calor. Los reproches atraen sólo enojo y mentira, pero el amor siempre llega al corazón del otro.
¿Cómo vencer los celos? ¿Cuál es la actitud de la Iglesia frente a este pecado? ¿Qué oraciones debería hacer? Siento que ya no tengo fuerzas. No hace mucho mi esposo se fue de vacaciones a Egipto con su hermano y con nuestro hijo, pero sin mí. Al regresar, mi hijo me contó cómo conocieron a una mujer y tomaron el sol con ella, pasearon un poco... Y después la mujer se fue (con mi esposo), a su habitación. Tengo sospechas. ¿Qué puedo hacer? Lo más grave es que he dejado de creerle. Nuestro matrimonio tiene ya 13 años. Le pido sus oraciones.
Los celos y la envidia son dos serpientes que succionan la sangre del corazón del hombre, haciendo que la relación entre las personas deje de construirse sobre la base de la confianza y el respeto, para llenarlo todo de sospechas permanentes. Los esposos comienzan a atraparse mutuamente en mentira, convirtiendo en un tormento la vida común.
Los celos son una de las partes oscuras de los vínculos sentimentales, usualmente llamada, de forma incorrecta, “amor”. Los celos son, entonces, un sentimiento que debe ser eliminado o clarificado con el amor espiritual. La esposa cristiana debe ver en su esposo no sólo un cónyuge, sino también un amigo y confiar que él no la traiciona; debe ver en él la imagen y semejanza de Dios, pero también reconocer su personalidad predispuesta a las debilidades humanas. Debes intentar, pues, con paciencia y serenidad, ayudarlo a corregir sus errores y a luchar con el pecado. Cuando el esposo es culpable de algo, debe ser visto como si de un enfermo se tratara: demuéstrale mucho más calor. Los reproches atraen sólo enojo y mentira, pero el amor siempre llega al corazón del otro. ¡Que Dios te ayude!
(Traducido de: Arhim. Rafail Karelin, Învățături despre taina căsătoriei, trad. din limba rusă de Corina-Alexandra Toader, Ed. Sophia, București, 2013, p. 264-265