Palabras de espiritualidad

Dialogando con Dios sobre nuestras necesidades

  • Foto: Stefan Cojocariu

    Foto: Stefan Cojocariu

Translation and adaptation:

Hay veces en las que es más útil no recibir lo que pedimos. Así, lo que podría parecernos un fracaso es, de hecho, una ganancia.

La oración es algo fundamental, pero cuando se hace con la mente pura, es decir, cuando le agradecemos a Dios no sólo por que nos da, sino también porque no nos da lo que le pedimos. Y es que tanto el bien como el mal nos son de provecho. Así pues, aún cuando no recibimos nada, recibimos mucho, por el hecho de no recibir lo que no es bueno para nosotros. Ciertamente, hay veces en las que es más útil no recibir lo que pedimos. Así, lo que podría parecernos un fracaso es, de hecho, una ganancia. Por eso, no nos entristezcamos cuando Dios demore en responder a nuestras peticiones. No perdamos la paciencia. ¿O es que Él no tiene el poder de darnos lo que deseamos, aún antes de que se lo pidamos? Claro que sí, pero espera de nosotros un pretexto para ayudarnos con juicio. Por eso, orando, démosle a Dios un pretexto para ayudarnos y esperemos con fe y confianza a que Él nos otorgue Su bondad con sabiduría. ¿Nos dio lo que le pedimos? Agradezcámosle. ¿No nos lo dio? Agradezcámosle también, porque Él sabe lo que es mejor para nosotros, aunque nosotros no tengamos ni idea de ello.

(Traducido de: Sfântul Ioan Gură de Aur, Problemele Vieții, Editura Cartea Ortodoxă, p. 186)