Palabras de espiritualidad

Dios sabe cómo dispone las cosas para nuestro provecho espiritual

  • Foto: Oana Nechifor

    Foto: Oana Nechifor

No permitas que el demonio perturbe tu alma con toda clase de quejas, pensando que los demás se aprovechan de ti; al contrario, piensa que eres tú quien obtiene un beneficio al ayudar a tu prójimo.

Aunque te resulte difícil, si tu semejante te pide que le ayudes con algo que está a tu alcance ofrecerle, ¡haz un esfuerzo y tiéndele la mano! No permitas que el demonio perturbe tu alma con toda clase de quejas, pensando que los demás se aprovechan de ti; al contrario, piensa que eres tú quien obtiene un beneficio al ayudar a tu prójimo. Y así conservarás la paz de Dios en tu alma.

Debes creer que Dios puede disponer las cosas de una manera tal que quede tiempo suficiente para tus cosas. Eso sí, con Su permiso, es posible que algunas veces los demás se comporten injustamente contigo y te desprecien.

En dichas circunstancias, en vez de lamentarte, alégrate en tu interior, porque así recibirás el poder necesario para hacerte humilde. Con esto, Dios demuestra que no te ha olvidado, que no te desdeña, sino que cuida de ti, de tu crecimiento y tu edificación espirital.

(Traducido de: Arhimandritul Serafim AlexievViața duhovnicească a creștinului ortodox, traducere din limba bulgară de Valentin-Petre Lică, Editura Predania, București, 2010, p. 44)