El camino de la Palabra
El camino del Señor es la virtud, y el camino correcto es la forma correcta y pura de la virtud.
Los caminos de la Palabra son las distintas formas de las virtudes y los diferentes comportamientos o actividades, de acuerdo a la voluntad de Dios. Son sendas que preparan con aptitud aquellos que no cultivan la virtud y el estudio de las palabras divinas por soberbia, ni por interés, ni para ser elogiados por los demás o para envanecerse ante todos, sino que todo lo piensan, dicen y hacen para Dios. Porque la Palabra de Dios no se detiene en caminos que no son rectos, aunque parezcan preparados para ella. Por ejemplo, pensemos en alguien que ayuna y se abstiene de los alimentos que encienden las pasiones, y hace todo lo posible por evitar aquello que atrae los vicios. Podría decirse que éste ha preparado bien el camino para la Palabra. Pero si lo hace por pura vanidad o para agradar a los demás y que lo encomien, mas no para agradar a Dios, es que ese camino no es apto. Puede que el individuo se haya esforzado en prepararlo, pero nunca verá a Dios atravesándolo. Porque el camino del Señor es la virtud, y el camino correcto es la forma correcta y pura de la virtud.
(Traducido de: Sfântul Maxim Mărturisitorul, Răspunsuri către Talasie, în Filocalia III, traducere din greceşte, introducere şi note de pr. prof. dr. Dumitru Stăniloae, Editura Humanitas, Bucureşti, 2004, pp. 163-164)