Palabras de espiritualidad

El camino que lleva a vencer las pasiones

  • Foto: Oana Nechifor

    Foto: Oana Nechifor

Esta es una de las pruebas más amargas: entender que te hallas en la oscura fosa del pecado, siendo indigno del Santo de los Santos.

Cuando la mente del cristiano que ora se aparta —inducida por cualquier clase de pensamientos perniciosos— de ese estar ante el Dios Eterno, el miedo espiritual viene a atacarlo. Y verse a sí mismo sometido por las miserables pasiones que lo distraen de Dios es algo que le entristece mucho. Debido a ese desesperado dolor, la oración se localiza interiormente, en el centro de nuestro ser, como algo parecido a un espasmo; con esto, el hombre entero se contrae, como cuando cerramos fuertemente el puño. Y la oración se convierte en una plegaria sin palabras. Esta es una de las pruebas más amargas: entender que te hallas en la oscura fosa del pecado, siendo indigno del Santo de los Santos. Y no hay otro camino, uno más sencillo, para vencer las pasiones.

(Traducido de: Arhimandritul Sofronie, Despre rugăciune, p. 19)