Palabras de espiritualidad

El hombre que en verdad ama a Dios

  • Foto: Ovidiu Proca

    Foto: Ovidiu Proca

Un acto de amor es hacerle el bien a nuestro semejante y ser pacientes e indulgentes con él, guiándonos siempre por la justa medida en todo.

Si el amor es paciencia y bondad, el que es agresivo y astuto es también ajeno al amor. Y si el hombre es ajeno al amor, también es ajeno a Dios, porque Dios es amor.

Un acto de amor es hacerle el bien a nuestro semejante y ser pacientes e indulgentes con él, guiándonos siempre por la justa medida en todo.

El que realmente ama a Dios, no entristece a nadie ni se acongoja por las cosas pasajeras, porque la única tristeza que siente es una redentora, la misma que inundó a Pablo y también a los corintios.

(Traducido de: Sfântul Maxim MărturisitorulPatru sute de cugetări creștine, Editura Credința Strămoșească, Iași, 1998, p. 50)