Palabras de espiritualidad

El ser del hombre es como una iglesia mística

  • Foto: Oana Nechifor

    Foto: Oana Nechifor

El alma del hombre es como un altar, en el cual “le presenta a Dios los significados separados de los sentidos, después de haber apartado de ellos todo lo que es material y, por ende, impuro”.

El hombre, dice San Máximo, “es una iglesia en misterio”. Su cuerpo es como el naos (nave), “por medio del cual se irradia la parte activa del alma en el cumplimiento de los mandamientos, con una sabiduría práctica” (filosofía étică), en tanto que el alma es como un altar, en el cual “le presenta a Dios los significados separados de los sentidos, después de haber apartado de ellos todo lo que es material y, por ende, impuro”, y la mente es como una Santa Mesa en la que recibe la luz divina y vive junto a Dios. (...)

(Traducido de: Jean-Claude Larchet, Viața Liturgică, Editura Doxologia, 2017, p. 27)