El sufrimiento, escuela de vida
El sufrimiento es una escuela maravillosa, por medio de la cual el Señor le habla al creyente con un lenguaje especial. Para la vida del creyente, el sufrimiento es una nube, pero una nube que derrama una lluvia bendecida.
En el fuego de los sufrimientos y de las pruebas se solidifica nuestra fe. La escuela de la soledad y de los sufrimientos es un mentor maravilloso para los elegidos de Dios. Los israelitas debieron pasar por el desierto, antes de alcanzar el Canaán prometido. ¿Por qué? Porque ese desierto fue para ellos una escuela prodigiosa, en donde aprendieron a conocer realmente a Dios. En el fuego de las carencias y de los sufrimientos se fortaleció su relación con Dios.
El sufrimiento es una escuela maravillosa, por medio de la cual el Señor le habla al creyente con un lenguaje especial. Para la vida del creyente, el sufrimiento es una nube, pero una nube que derrama una lluvia bendecida. El desierto de los sufrimientos del creyente es un desierto lleno del maná celestial y agua de manantial.
(Traducido de: Preot Iosif Trifa, Citiri și tâlcuiri din Biblie, Editura Oastea Domnului, Sibiu, 2010, p. 105)