Mi esposo y yo queremos relatar cómo nos ayudó Santa Matrona. Durante 17 años vivimos casados sólo por lo civil, hasta que en 1997 Dios nos iluminó para que decidiéramos casarnos por la Iglesia. No teníamos hijos. Me sometí a verios tratamientos para poder quedar encinta, sin éxito. Debido a nuestros incontables pecados, Dios no nos enviaba hijos. En 1995 me sometí a una difícil operación, siendo clasificada después con una invalidez de nivel II. En 1997 me operé otra vez. Entretanto, en 1996 alguien me habló de los milagros de la madre Matrona. Así, comencé a visitarla en el Cementerio Danilovsk. Oraba pidiéndole salud, tanto para mí como para mis seres queridos... y también le pedía que me ayudara a tener hijos. Para ser sincera, ni siquiera sabía si podría ser una buena madre, porque mi salud no era buena. Sin embargo, me repetía “Que se haga la voluntad de Dios en todo”.

En 1997 soñé que una voz femenina me decía: “Vas a tener una niña”. Esto sucedió a principios de año. Y pensé: “Aquí hay algo que no está bien. ¿Cómo podría sucederme algo así, si no puedo tener hijos?”. En otro sueño se me reveló que daría a luz entre noviembre y diciembre. Se lo conté todo a mi esposo. Esperé un año entero, pero nada ocurrió. Entonces pensé que seguramente no había entendido bien.

Pasó un año... ¡Y el 22 de noviembre tuve una niña, por obra de Dios! Le pusimos de nombre María. Yo, pecadora, había olvidado el día en que nació la madre Matrona. Le dije a mi esposo: “Espera... sólo voy a leer un poco de la vida de Santa Matrona”. Minutos después ambos llorábamos de asombro. ¡Santa Matrona nació un 22 de noviembre! ¡Nuestra mediadora ante el Señor y Su Santísima Madre es Santa Matrona! (Anatoli y Tatiana, Moscú)

(Traducido de: Viața și minunile Sfintei Matrona din Moscova, Editura Sophia, București, 2003)