La Santa Iglesia navega sobre las olas de la vida
Todos los cristianos verdaderos del mundo entero pertenecen a la única Iglesia verdadera y, guardando su doctrina en toda su plenitud y pureza, conforman un inmenso conjunto de barcas que surcan el mar de la vida sin hundirse en sus oscuras profundidades.
La Santa Iglesia navega sobre las olas de la vida, permaneciendo siempre incólume con su divina doctrina y portando en su seno el verdadero conocimiento sobre Dios, sobre el hombre, sobre el bien y el mal, sobre el mundo material y temporal, y sobre el mundo espiritual y eterno.
Todos los cristianos verdaderos del mundo entero pertenecen a la única Iglesia verdadera y, guardando su doctrina en toda su plenitud y pureza, conforman un inmenso conjunto de barcas que surcan el mar de la vida sin hundirse en sus oscuras profundidades.
(Traducido de: Sfântul Ignatie Briancianinov, Cuvinte către cei care vor să se mântuiască, traducere de Adrian și Xenia Tănăsescu-Vlas, Editura Sophia, București, 2000, p. 38)