La vida espiritual y el sentido de la eternidad
¿En que consiste esta vida? En que vivamos la palabra del Señor, en que hagamos Su voluntad, en que creamos y en que realicemos todas las disposiciones de la Iglesia establecidas en la Santa Escritura.
La vida espiritual es lo que nos da el sentido de la eternidad. Quien viva una vida espiritual, vivirá en el Cielo ya desde aquí, desde esta tierra. Para él, la muerte no será sino un portal, un paso. Para aquel que vive espiritualmente, la muerte deja de ser un muro, algo terrorífico, un final, para convertirse en un paso entre la vida espiritual con este cuerpo a una vida espiritual en los Cielos.
Este es nuestro alimento, dice Cristo: la vida espiritual. ¿En que consiste esta vida? En que vivamos la palabra del Señor, en que hagamos Su voluntad, en que creamos y en que realicemos todas las disposiciones de la Iglesia establecidas en la Santa Escritura. Este es también nuestro atuendo: cuando somos bautizados y rodeamos la Santa Mesa, decimos: “Todos los bautizados en Cristo os habéis revestido de Cristo”. Nos vestimos en el Espíritu de Dios, en Su gloria, haciéndonos semejantes a Él por medio del Bautismo, nuestras buenas obras, la Santa Comunión y con toda esta vida espiritual que practicamos.
(Traducido de: Părintele Gheorghe Calciu, Cuvinte vii, ediţie îngrijită la Mănăstirea Diaconeşti, Editura Bonifaciu, 2009, pp. 20-21)