Los hábitos de la juventud son gozo y garantía para la vida entera
¡Joven! ¡Sé sabio y previsor: desde los años de tu juventud procura tener sólo huenos hábitos! Ellos tienen una fuerza semejante a la de tus propias destrezas. El que sigue al Señor Jesucristo debe adquirir buenos hábitos y desechar los que sean perniciosos.
¡Joven! ¡Sé sabio y previsor: desde los años de tu juventud procura tener sólo huenos hábitos! Ellos tienen una fuerza semejante a la de tus propias destrezas. El que sigue al Señor Jesucristo debe adquirir buenos hábitos y desechar los que sean perniciosos.
¡Joven! ¡Sé sabio y previsor, adquiere tan sólo buenas costumbres! Porque cuando seas grande, incluso en la vejez, podrás gozar del tesoro adquirido, sin esfuerzo, en los años de tu mocedad.
(Traducido de: Sfântul Ignatie Briancianinov, Cuvinte către cei care vor să se mântuiască, traducere de Adrian si Xenia Tănăsescu-Vlas, Editura Sophia, Bucureşti, 2000, p. 44)