Los sufrimientos de esta vida son pasajeros
Aprendamos a no temer a las ofensas y los sacrificios, porque son cosas pasajeras que pasan tan rápido como un sueño y como una sombra.
Soportemos con paciencia estos breves sufrimientos, para poder recibir la corona de la justicia. ¡Cuánto se sacrificaron nuestros padres, ayunando, velando, orando con lágrimas y con toda clase de esfuerzos ascéticos! Hoy, el dolor de esos sacrificios pretéritos ha desaparecido, porque todos ellos han pasado a gozar de la inefable felicidad de la eternidad. También nosotros aprendamos a no temer a las ofensas y los sacrificios, porque son cosas pasajeras que pasan tan rápido como un sueño y como una sombra. No perdamos más el tiempo, sino que empecemos a cumplir los mandamientos de Dios con alegría.
(Traducido de: Sfântul Teodor Studitul, Cuvântări duhovnicești, Editura Episcopia Alba Iulia, Alba Iulia, 1994, p. 84)