No todos se salvan en el monasterio y no todos se pierden en el mundo
Vive honradamente y con temor de Dios, pidiéndole a la Virgen María que te ayude a salvarte.
Una chica que tenía la intención de hacerse monja vino a buscar al padre, esperando recibir su bendición. Sin embargo, éste le dijo:
–No. Tu camino es vivir en el mundo y tener hijos. No todos se salvan en el monasterio y no todos se pierden en el mundo. Vive honradamente y con temor de Dios, pidiéndole a la Virgen María que te ayude a salvarte.
Y así fue. La chica se casó con un hombre bueno, aunque enviudó pronto. Desde entonces le pide al Señor y a Su Santísima Madre que le hagan digna de vivir con bendiciones, en pureza y paz.
(Traducido de: Sfântul Lavrentie de la Cernigov, Viaţa, învăţăturile şi minunile făcute de Dumnezeu prin acest mare Părinte, Editura Credinţa strămoşească, 2003, p. 36)