Palabras de espiritualidad

Nunca sabes en dónde se está mejor

    • Foto: Bogdan Zamfirescu

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Translation and adaptation:

Los planes del hombre son vanos y equivocados. Cuando tenemos que enfrentar algún problema y sabemos que no depende de nosotros, sentimos un especial alivio y paz espiritual. ¡Que sea la voluntad de Dios!

Quiero abandonarme completamente a la voluntad de Dios y dejar de organizar —solo y de acuerdo a lo que me dicta la mente— mi propia vida. Creo que Dios me enviará lo que necesito, lo que me es de provecho... Debemos pedirle a Dios que nos muestre el camino. (...) Pidámosle al Señor que nos salve y que nos ayude en nuestras aflicciones y necesidades. No existe otro puerto, otra esperanza. Los planes del hombre son vanos y equivocados. Cuando tenemos que enfrentar algún problema y sabemos que no depende de nosotros, sentimos un especial alivio y paz espiritual. ¡Que sea la voluntad de Dios! Que Dios no ruborice nuestra fe y nuestra fidelidad a Su voluntad. Nuestra única esperanza es Él.

He aquí un fundamento vital. Todo lo demás es endeble, sobre todo, en nuestro estado. Nunca sabes en dónde se está bien, en dónde se está mal y qué es lo que te espera. ¡Que se haga la voluntad de Dios! (...) Estaba pensando también que nosotros, los monjes, que nos hemos alejado del mundo, hoy, vivimos retraídos. Así lo quiso el Señor. Nuestro deber es guardar la fe y evitar todo pecado, dejando lo demás en las manos de Dios.

 (Traducido de: Sfântul Nicon de la OptinaFilocalia de la Optina, Editura Egumenița, Galați, 2009, p. 100)