El mundo actual es un verdadero “valle de lágrimas”, lleno de tribulaciones y pesares, de personas que sufren, de individuos irascibles, hostiles y dispuestos a hacer el mal, precisamente porque los hombres ya no conocen la paz y el consuelo que el Señor nos ofrece a todos. Los cristianos de hoy en día bregan, impotentes, entre toda clase de angustias, carencias y preocupaciones, cuando a su lado se halla un tesoro invaluable: Jesús, nuestro Salvador, Quien podría librarlos en un instante de toda miseria carnal y espiritual. ¡Pero los hombres ignoran la existencia de ese tesoro! Si tan solo se adentraran un poco en las profundidades de los Evangelios, lo encontrarían inmediatamente. La vida en este mundo está llena de paz, consuelo y un santo regocijo, para aquel que la vive con el Señor y se mantiene cerca de Él.

(Traducido de: Preotul Iosif Trifa, Mai lângă Domnul meu, Editura Oastea Domnului, Sibiu, 2003, p. 9)