Palabras de espiritualidad

¿Por qué se nos va el tiempo complicándonos la vida?

  • Foto: Oana Nechifor

    Foto: Oana Nechifor

Si observamos con atención, toda nuestra vida está llena de complicaciones. Continuamente nos la complicamos. No sé exactamente por qué, pero todos nos complicamos la vida.

Si ha llegado a tus manos ese libro, escrito por un gran asceta que descansó en el Señor en 1994 [San Paisos el Hagiorita], seguramente habrás leído en él la forma en que debemos simplificar nuestra vida. Porque, si observamos con atención, toda nuestra vida está llena de complicaciones. Continuamente nos la complicamos. No sé exactamente por qué, pero todos nos complicamos la vida. A veces parecemos tener motivos para ellos, es decir, los invocamos, los encontramos. Y formamos, así, un cúmulo de excusas: ‟Tenía que complicarme la vida... no me quedaba otra salida”.

De igual forma, observamos que día tras día las personas utilizan las mismas expresiones, al encontrarse luego de algún tiempo si verse. “No tengo tiempo”, “No he tenido tiempo”. Por ejemplo: “No me has visitado”. “No te he visitado, porque no tengo tiempo”. “Antes éramos más unidos”. “Tienes razón. Pero es que antes tenía más tiempo”. Porque el tiempo es una parte de la eternidad, y porque nosotros rechazamos vivir la eternidad. Claro, el tiempo de nuestra vida es muy breve, pero este aspecto también es muy importante, Tendríamos que recordar que, de hecho, vivimos una parte de la eternidad. Ínfima, sí, pero sigue siendo una parte de ella. De hecho, una parte muy importante, porque nos prepara para la vida futura.

(Traducido de: Preot Nicolae Tănase, Să nu-L răstignim iarăşi pe Hristos, predici şi conferinţe, Editura Agaton, pp. 116-177)