¿Qué pasaría si Dios viniera en este momento y me reprendiera?
Antes de empezar a hacer algo, pregúntate: “¿Qué pasa si en este momento viene Dios a verme y me reprende?”. Si crees que Dios te condenará, deja inmediatamente eso que ibas a hacer y empieza a hacer cualquier otra cosa, con toda esperanza.
Dijo un anciano:
—Antes de empezar a hacer algo, pregúntate: “¿Qué pasa si en este momento viene Dios a verme y me reprende?”. Si crees que Dios te condenará, deja inmediatamente eso que ibas a hacer y empieza a hacer cualquier otra cosa, con toda esperanza. Porque el obrero siempre debe estar listo para emprender su camino. Y, al trabajar, si te detienes un poco, o si vas de camino a tu labor, pregúntate siempre: “¿Qué pasaría si Dios me llamara en este momento ante Su presencia?”. Y observa con atención lo que te responda tu conciencia. Y, desde luego, no tardes en hacer lo que ella te inste a hacer. Y si deseas saber si Dios se ha apiadado de ti, ¡pregúntaselo a tu conciencia! No dejes de hacerlo, hasta que tu corazón se tranquilice y tu conciencia te diga: “Creemos absolutamente en la piedad de Dios, que en verdad vendrá sobre nosotros”. Pero también mantente atento a tu corazón, no sea que diga esto desde la duda. Porque si en ti duda uno solo de tus cabellos, te verás lejos de la piedad divina.
(Traducido de: Cuvinte folositoare la sfinţilor bătrâni cei fără de nume, Pagini de filocalie)