Palabras de espiritualidad

¿Quién es recordado en las oraciones de la Iglesia?

  • Foto: Silviu Cluci

    Foto: Silviu Cluci

La Iglesia no nos olvida nunca, nos recuerda, nos recuerda, nos recuerda... Y, aunque se pierdan los nombres, nos sigue recordando.

Mencionamos a nuestros difuntos, a nuestros antepasados, a esos parientes que recordamos por sus nombres y a quienes no pudimos conocer, a nuestros familiares en cuya memoria se han oficiado responsos y a quienes no se les han hecho, a los que murieron preparados y a los que no.

Por eso, la Iglesia reúne a sus hijos, pero sólo a quienes voluntariamente aceptan estar en ella. La Iglesia no los obliga, sólo los exhorta. La Iglesia no nos olvida nunca, nos recuerda, nos recuerda, nos recuerda... Y, aunque se pierdan los nombres, nos sigue recordando.

Porque entonces elevamos nuestras kolivas y cantamos “¡Memoria eterna!”, es decir, que Cristo Dios les mencione eternamente, aunque nosotros no podamos ya hacerlo. Amén,

(Traducido de: Preot Nicolae Tănase, Să nu-L răstignim iarăşi pe Hristos, Editura Agaton, Făgăraș, 2011, p. 78)