Palabras de espiritualidad

San Nectario nos explica cómo llegamos a la salvación

  • Foto: Oana Nechifor

    Foto: Oana Nechifor

Es necesario que primero nosotros queramos salvarnos, para que después la Gracia nos ayude a alcanzar ese propósito.

¿Cómo contribuyen, al mismo tiempo, la Gracia Divina y la voluntad del hombre, para que este pueda salvarse? Por una parte, la Gracia llama e ilumina la mente y el corazón, y la voluntad colabora haciendo que los ojos se abran y el corazón se purifique.

Así las cosas, la salvación empieza con la Gracia de Dios, se forma con la voluntad y se perfecciona con el don divino, que también la corona. La “Parábola del sembrador” es el mejor ejemplo de esto que digo. El labriego arroja las semillas, la tierra fértil las recibe y Dios las hace crecer, bendiciéndolas. A partir de esto concluimos que es necesario que primero nosotros queramos salvarnos, para que después la Gracia nos ayude a alcanzar ese propósito.

(Traducido de: Sfântul Nectarie de EghinaDespre îngrijirea sufletului, Editura Sophia, București, 2009, p. 66)