Palabras de espiritualidad

Sobre el juicio del alma

    • Foto: Bogdan Bulgariu

      Foto: Bogdan Bulgariu

Translation and adaptation:

El alma es enviada a donde decida el Justo Juez, sea con los ángeles, a la salvación, o con los demonios, al castigo y los trabajos eternos.

Con todo, la muerte no es tan terrible como el juicio que tiene lugar en ese momento; porque, cuando el alma sale del cuerpo, viene a su encuentro una gran multitud de ángeles, pero también se reúne un sinnúmero de demonios. Los ángeles le muestran sus buenas acciones, en tanto que los demonios le enseñan todo lo malo que hizo. Y, sin embargo, (el alma) espera que venga del cielo su condena, pero también espera que pueda salvarse. Sufre, alza sus manos al cielo, ruega no ser entregada a los espíritus malignos... También los ángeles enfrentan una fuerte lucha en esos momentos, y se alegran inmensamente cuando escuchan la decisión de la salvación. Al contrario, los malos espíritus esperan y desean escuchar una condena. Y el alma es enviada a donde decida el Justo Juez, sea con los ángeles, a la salvación, o con los demonios, al castigo y los trabajos eternos.

En esto consisten, hijo mío, el miedo y el estremecimiento, cuando al hombre le asusta ser condenado eternamente. No obstante, la muerte es algo normal, algo que nos espera a todos.

(Traducido de: Un episcop ascet, Viața și învâțâturile Sfântului Ierarh Nifon, Ed. Mănăstirea Sihăstria, 2010, p. 58)