Palabras de espiritualidad

Tenemos que convencernos de que todo viene de Dios

    • Foto: Constantin Comici

      Foto: Constantin Comici

Conserva la paz y agradece, porque todo lo que sucede es por tu bien, sea de forma visible o aun cuando no puedas verlo.

Tienes que fortalecerte en la fe de que todo viene de Dios, incluso las cosas más ínfimas que nos suceden, y aceptar que todo lo que nos sobreviene ha sido enviado por Él Mismo. Conserva la paz y agradece, porque todo lo que sucede es por tu bien, sea de forma visible o aun cuando no puedas verlo. ¿Sabes cómo se acendran las cosas hechas de metal? Después de haber sido moldeadas y formadas, son sometidas a la acción purificadora del fuego, para posteriormente ser sumergidas en agua fría.

Lo mismo ocurre contigo… Nada de esto es nuevo para ti, todo esto te es conocido… Por eso, te recomiendo que leas la Santa Escritura, en lo que se refiere a tu situación. Ahí encontrarás la luz necesaria para disipar la oscuridad que ahora te rodea.

Las aflicciones vienen de Dios. Lo que nos queda es ser pacientes y mostrarnos agradecidos. Y si tenemos al alcance la forma de apartarlas con la venia de Dios, no es pecado valernos de esos medios para librarnos del dolor y las contrariedades. En tu caso, ¿tienes al alcance esos medios? Claro que sí…

(Traducido de: Sfântul Teofan ZăvorâtulBoala și moartea, Editura Sophia, București, 2007, p. 40)