Palabras de espiritualidad

Una fuerza que usamos en contra del mal

    • Foto: Oana Nechifor

      Foto: Oana Nechifor

El Señor nos dio la ira para que pudiéramos luchar contra las pasiones y los demonios.

Dios nos dotó también de la ira. Ella es el nervio del alma. Es una fuerza. El Señor nos la dio para que, con ella, pudiéramos luchar contra las pasiones y los demonios. ¡En esto consiste la correcta utilización de la ira! Tomamos esa fuerza del demonio y se la damos a Cristo. ¡Entrégate a Cristo con toda tu fuerza, con ese “nervio”!

(Traducido de: Părintele Porfirie, Antologie de sfaturi și îndrumări, traducere din limba greacă de Prof. drd. Sorina Munteanu, Editura Bunavestire, Bacău, p. 208)