La ceremonia de entronización tuvo lugar en  2008, en la Catedral Metropolitana de Iaşi, al finalizar la Divina Liturgia, y contó con la presencia de Su Beatitud, Daniel, Patriarca de Rumanía, y una congregación de 32 jerarcas, miembros del Santo Sínodo de la Iglesia Ortodoxa Rumana, así como la participación de más de 5000 fieles.

Ese día, el octogésimo primado de la Metropolía de Moldova y Bucovina dirigió a los presentes unas palabras llenas de ánimo y emoción: 

«Le agradecemos a Dios por este hermoso día. El cofre con las reliquias de Santa Parasqueva (Parascheva) constituye para mí un aliento, un apoyo, una protección espiritual para la labor que hoy iniciamos. De mi parte, un abrazo lleno de amor para cada uno de ustedes. Que Dios nos conceda la fortaleza necesaria para avanzar juntos en el camino a la salvación de nuestras almas y glorificarle a Él. Asimismo, pídanle a Dios que me provea de las fuerzas para que, junto con nuestros hermanos sacerdotes y con ustedes, venerable pueblo de Moldova y Bucovina, podamos continuar la tarea de mis predecesores en el trono de Metropolitano de Moldova y Bucovina, especialmente la obra de 18 años de trabajo abnegado de Su Beatitud Daniel».

En estos 15 años de servicio en el corazón de Moldova, el Metropolitano Teófano ha reorganizado, ha enriquecido y ha dado continuidad a los proyectos y sectores existentes desde antes. De igual forma, ha iniciado numerosos proyectos en los campos de la teología, la educación, la asistencia social, la medicina, la psicología y el turismo. Ha oficiado constantemente en la Catedral Metropolitana y también en todo el ámbito territorial del Arzobispado; ha participado en la consagración y reconsagración de iglesias y monasterios, permaneciendo siempre cercano al clero y a los fieles.

***

Le pedimos a nuestro Buen Dios que le conceda a Su Alta Eminencia Teófano una labor pastoral fructífera y duradera, en la incesante obra de proclamar la palabra de Dios.

¡Que sean muchos años más, con salud y bajo el amparo de nuestro Señor, Su Alta Eminencia!