Palabras de espiritualidad

¡Aprende a ser humilde!

  • Foto: Oana Nechifor

    Foto: Oana Nechifor

Si guardas silencio acerca de tus méritos, Dios hablará por ti. Mas si proclamas grandes cosas de ti mismo, Dios callará y se apartará de tu lado.

Si haces algún bien, cuídate de la vanagloria. Porque si te ensalzas a ti mismo, en un instante perderás, por tu propio orgullo, todo lo que has ganado con tu esfuerzo, y te quedarás sin la Gracia de Dios. Del halago nace la soberbia, de la soberbia la caída, y de la caída, el alejamiento de Dios. 

Dios, Quien creó todo, es glorificado y enaltecido por los hombres, aunque nunca como lo merece en realidad. Y tú, que no has hecho nada por ti mismo, ¿con qué derecho ansías ser alabado y engrandecido?

No busques la lisonja de los hombres, ni te encomies a ti mismo. Dios lo ve todo, y aun sin que tú mismo hables de lo que haces, los hombres reconocerán tus obras si son buenas. Pero si tú te exaltas, todos te mirarán con desdén. En cambio, si no te glorificas, Dios mismo y los hombres te honrarán. Si guardas silencio acerca de tus méritos, Dios hablará por ti. Mas si proclamas grandes cosas de ti mismo, Dios callará y se apartará de tu lado.

(Traducido de: Sfântul Dimitrie al RostovuluiAlfabet duhovnicesc, Editura Sophia, București, 2007, p. 62)