Cómo es que el alma cae en el engaño
El engaño empieza por tres motivos: por orgullo, por la envidia de los demonios y por la prudente aquiescencia de Dios.
Tenemos que saber que el engaño empieza por tres motivos: por orgullo, por la envidia de los demonios y por la prudente aquiescencia de Dios. Y las causas de estos tres aspectos son: del orgullo, la frivolidad de la mente; de la envida de los demonios, el crecimiento espiritual; y del consentimiento de Dios, el pecado. El engaño que viene de nuestro orgullo y de la envidia de los demonios es fácil de sanar, cuando el hombre se hace humilde. Pero el engaño que proviene de la anuencia de Dios muchas veces permanece hasta la muerte.
(Traducido de: Sfântul Grigorie Sinaitul, Filocalia VII, Editura IBMBOR, București, 1977, p. 201)