Dios no deja solo al hombre que se aparta de Él
La respuesta del hombre al amor de Dios consiste en saberle agradecer.
Al hombre que se aparta de Él y vive en el pecado, Dios lo visita de distintas maneras, para atraerlo a Su presencia y demostrarle Su misericordia. Si nosotros no hacemos lo mismo con nuestro semejante, es que no hay amor en nuestra alma, no somos de Dios.
El cristiano debe apreciar el amor de Dios, valorarlo y cultivar un amor igual. La respuesta del hombre al amor de Dios consiste en saberle agradecer. Y es que Dios se alegra cuando el hombre hace Su voluntad, lo cual consiste en cumplir Sus mandamientos, el mandamiento del amor y el mandamiento de la humildad. Cuando el hombre tiene humildad y amor, Dios vive en él, y él vive en Dios
(Traducido de: Avva Efrem Filotheitul, Sfaturi duhovniceşti, traducere de Pr. Victor Manolache, Editura Egumeniţa, Alexandria, 2012, p. 57)