El rol de la Madre del Señor en la vida de la Iglesia
Todo esto tiene justificación, porque ella se hizo digna de ser la Madre de Dios, y por medio suyo fue que Él se unió a los hombres.
De toda la obra salvadora de Dios en el mundo, la Santa Iglesia exalta especialmente el milagro de milagros: la encarnación de Dios y sus consecuencias redentoras para la humanidad, así como a la Purísima y Muy Gloriosa Madre de Dios. Las loas dirigidas a ella, como los distintos cánones, versos, oraciones y acatistos, son tantos como las arenas del mar. Y todo esto tiene justificación, porque ella se hizo digna de ser la Madre de Dios, y por medio suyo fue que Él se unió a los hombres y los deificó. También nosotros debemos “respirar” a través de esta encarnación mística, vivir, hacernos humildes y fortalecernos.
(Traducido de: Ioan din Kronștadt, Liturghia – cerul pe pământ, Editura Deisis, 2002, p. 48)