El valor de las almas simples
Donde hay enfermedad, debe haber medicamento. La relación de la fe con los sistemas filosóficos y teológicos es similar a la relación entre la higiene y el medicamento.
Aquí, en los Balcanes, aún puedes encontrar, en los pequeños poblados de las montañas, almas simples con tanta bondad, que, si las lleváramos a alguna calle de las cinco grandes ciudades, se recordarían, queriéndolo o no, de aquel relato sobre el tesoro que está oculto debajo de la tierra.
¿Qué pasaría con esas virtuosas almas si las pusiéramos a estudiar a setenta y siete filósofos y teólogos de la ciudad?
Ocurriría, sin duda, lo mismo que con un hombre sano que ingiere setenta y siete pastillas de algún medicamento. Se enfermarían.
Las filosofías y las teologías se multiplican allí donde prospera la imbecilidad espiritual. Donde hay enfermedad, debe haber medicamento. La relación de la fe con los sistemas filosóficos y teológicos es similar a la relación entre la higiene y el medicamento.
(Traducido de: Sfântul Nicolae Velimirovici, Învățături despre bine și rău, Editura Sophia, București, 2006, p. 79)