Palabras de espiritualidad

Evitemos los libros que nos provoquen una guerra espiritual

  • Foto: Oana Nechifor

    Foto: Oana Nechifor

Entonces entendí que no debemos detenernos en cosas que no podremos enfrentar, si no tenemos la debida madurez espiritual.

Recuerdo que, allá por el año 1971, llegó a mis manos un libro del extinto profesor P. Trempelas, con el siguiente contenido: Qué es el espiritismo, Historia del espiritismo, Fenómenos espiritistas, Explicaciones, Qué son los médiums, Espiritismo como revelación, Espiritismo y Cristianismo, etc. Mientras más avanzaba en la lectura, sentía que lo que iba leyendo me provocaba fobias, perturbación, problemas para concentrarme y dudas en la fe. Sin que yo le contara nada, un día vino el padre y me ordenó tajantemente:

¡Deja inmediatamente de leer ese libro, porque el astuto te está atacando con ferocidad!

Ciertamente, la única parte que leí entera fue la de la relación entre el espiritismo y el cristianismo. El resto casi ni lo había hojeado. Entonces entendí que no debemos detenernos en cosas que no podremos enfrentar, si no tenemos la debida madurez espiritual, ni estudiar libros que puedan aturdirnos o que se ocupen de las cosas del demonio, o que, en general, tengan un contenido pernicioso.

(Traducido de: Părintele Porfirie, Antologie de sfaturi și îndrumări, Editura Bunavestire, Bacău, p. 122)