La doctrina más importante que Dios le dio al hombre: la Cruz
Hijo, la cruz es la pedagogía más importante de Dios para con el hombre. Fue por nosotros que el Señor se sacrificó en la cruz, enseñándonos así lo que es amar en verdad, porque todo lo hizo por amor a la humanidad.
Cierta vez, un joven deseoso de crecer en la virtud se acercó a un monasterio, buscando el consejo de un anciano monje:
“ — Por favor, padre, quisiera saber si tiene algún libro en el que pueda aprender cómo ser un buen cristiano, cómo pensar, cómo actuar... ¡Un libro que me explique todo eso!”
Luego de escuchar aquella petición, el anciano le respondió al muchacho que tenía lo que necesitaba y le pidió que esperara unos minutos, porque iría a su celda a traerlo. Sin embargo, al volver, lo único que había en sus manos era un crucifijo. Sonriendo, se lo ofreció al joven, quien le miraba estupefacto. Entonces, el anciano dijo:
“— Hijo, la cruz es la pedagogía más importante de Dios para con el hombre. Fue por nosotros que el Señor se sacrificó en la cruz, enseñándonos así lo que es amar en verdad, porque todo lo hizo por amor a la humanidad. La cruz es el camino que el hombre debe seguir para llegar al amor, es decir, a Dios. El que sabe cargar su propia cruz, porta, al mismo tiempo, la gracia y el amor del Señor. Por eso, la cruz no es una carga, sino una felicidad. Cuando te entregas a quien amas, no lo haces con tristeza y poniendo condiciones, sino con alegría y entusiasmo. La cruz significa, entonces, coraje y paciencia, pero, sobre todo, amor.
Buscabas un libro para leerlo con tus ojos e iluminar tu mente. En cambio, toma esta cruz, que es un libro que deberás leer con el alma, para que ilumine tu vida entera.”
(Traducido de: Leon Magdan, Cele mai frumoase Pilde şi povestiri creştin-ortodoxe, Editura Aramis, p.31)