Palabras de espiritualidad

Los peligros de centrar la vida familiar en la actividad académica de los hijos

  • Foto: Oana Nechifor

    Foto: Oana Nechifor

Por una parte, puede exacerbar su vanidad y, por otra, puede hacer que en el niño surja el sentimiento de no ser amado por lo que es, sino por sus logros.

La exagerada fijación de los padres en los éxitos académicos del niño es algo muy peligroso. Por una parte, puede exacerbar su vanidad y, por otra, puede hacer que en el niño surja el sentimiento de no ser amado por lo que es, sino por sus logros, especialmente si los padres no suelen prodigarse en muestras de ternura o en elogios.

Cuando el niño comienza a ir a la escuela, tanto lo que aprende como sus éxitos o fracasos son cosas que vendrán a ocupar un lugar prominente en su vida, querámoslo o no. Pero ni siquiera entonces debemos aceptar que todas las conversaciones entre padres e hijos tengan como centro las lecciones, las tareas, los exámenes y las calificaciones recibidas. En el caso del niño preescolar, cuya relación con los padres se encuentra todavía en proceso de formación, es imperioso entender que necesita estar convencido de que no es amado por un dibujo bien realizado o por el verso recitado sin errores, sino simplemente porque existe.

(Traducido de: Tatiana L.Șișova, Când copilul nu ascultă, traducere din limba rusă de Adrian Tănăsescu-Vlas, Editura Sophia, București, 2015, pp.149-150)