Nuestra veneración a la Santísima Madre del Señor y la importancia de entender su virginidad
Es necesario entender que nuestro Señor Jesucristo no es solamente el Hijo único de Dios, sino también el Hijo único de la Virgen María, es decir, de la humanidad.
La Iglesia Ortodoxa honra la triple virginidad de la Madre del Señor. Podemos ver, en los santos íconos de la Madre del Señor, tres estrellas: una sobre la frente y las otras dos sobre los hombros. Cada ícono de la Madre del Señor expresa esta fe, que es la fe cristiana. Esto significa que la Madre del Señor no conoció varón antes de dar a luz a Cristo, que guardó su virginidad después de la Natividad de Jesús y que tampoco conoció varón el resto de su vida. Es necesario entender que nuestro Señor Jesucristo no es solamente el Hijo único de Dios, sino también el Hijo único de la Virgen María, es decir, de la humanidad.
(Traducido de: Părintele Marc-Antoine Costa de Beauregard, Tineretul ortodox și societatea modernă, Editura Doxologia, Iași, 2014, pp. 31-32)