Palabras de espiritualidad

Por qué no debemos titubear en nuestra esperanza

    • Foto: Oana Nechifor

      Foto: Oana Nechifor

A Él le interesa saber si estamos preparados para soportar al menos un poco de sufrimiento por nuestros pecados.

No pongamos en duda, hermanos, nuestra esperanza en la resurrección, porque Aquel que sufrió por nosotros cuida también de nuestra salvación. Su compasión es más abundante de lo que podríamos entender, y Su Gracia es más grande que todo lo que podríamos pedir. Su diestra se halla extendida, día y noche, lista para ayudar, consolar y alentar a cada uno de nosotros. A Él le interesa saber si estamos preparados para soportar al menos un poco de sufrimiento por nuestros pecados y si nos entristecemos por esa partícula de justicia que extrae de este de vez en cuando, desde nuestra lucha contra las pasiones y el pecado. Y así, partiendo de estos insignificantes inicios, Él quiere hacernos herederos del Reino de los Cielos y llevarnos al gozo que hay en él.

(Traducido de: Isaac Sirul, Cuvinte către singuratici, Editura Deisis, 2007, pp. 382)