¿Quieres saber qué piensa Dios de ti?
¿Quieres saber qué piensa Dios de ti? Simplemente pregúntate qué piensas tú de tu semejante.
¿Quieres saber qué piensa Dios de ti? Simplemente pregúntate qué piensas tú de tu semejante. Pero ¿quién es tu semejante? Bien, piensa en la persona que peor te cae en este mundo. ¡He aquí tu semejante! Y sólo cuando logres vencer el disgusto y la incomodidad que te provoca su sólo recuerdo, no digamos su presencia, entonces sabrás que Dios te ha perdonado, porque Él mismo así lo dispuso.
Esta es la forma en que debemos entender las palabras de San Juan Climaco y otros santos, entonces cuando dicen que es por medio del amor que conseguimos alejarnos más rápidamente del pecado y obtenemos el perdón que necesitamos, más fácilmente que mediante cualquier otro esfuerzo.
(Traducido de: Ieromonah Savatie Baștovoi, A iubi înseamnă a ierta, ediția a doua, Editura Cathisma, București, 2006, p. 34)