Todo lo que hace el verdadero amor
Aquel que ama a Dios, teniendo el corazón lleno de amor divino, ama también a sus enemigos, bendice a quien le maldice, hace el bien a quienes le odian y ora por quienes le dañan y le persiguen.
El amor por Dios nace de la fe sincera, porque aquel que cree verdaderamente en Dios, jamás permite que ese amor muera.
Más resiste la hierba cuando es quemada por el fuego, que el demonio al notar la llama del amor. El amor es más sólido que el muro de una fortaleza y más fuerte que el diamante.
El amor no consiste en palabras vacías, no es solamente un nombre: el amor es protección, y se demuestra con nuestras obras. Aleja la pobreza, corre en auxilio del enfermo, ayuda al que está en peligro, acompaña a los tristes, llora con los que lloran y se alegra con los que se alegran.
Aquel que ama a Dios, teniendo el corazón lleno de amor divino, ama también a sus enemigos, bendice a quien le maldice, hace el bien a quienes le odian y ora por quienes le dañan y le persiguen.
(Traducido de: Monahul Teoclit Dionisiatul, Sfântul Nectarie din Eghina Făcătorul de minuni, Editura Sophia, p. 214)