Cómo alejar los malos pensamientos y mantener la paz
Estemos atentos a nosotros mismos, cuando aparezcan pensamientos malos. No importa de qué se traten: si la mente no está atenta, ellos entran y crean, de acuerdo a nuestros debilidades, un estado insano. ¡Lo único que puede salvarte es la vigilia permanente!
No hables mucho. No entres en controversias, discusiones, palabreríos y todo lo que sale de una lengua distraída. Desházte inmediatamente de los malos pensamientos y de la suciedad que haya en tu mente. Porque cuando ellos te atacan en tu mente y en tu corazón, te crean un estado grave. Mientras que si estamos atentos a la aparición de imágenes inadecuadas y a los pensamientos que les acompañan, permaneceremos en paz y nos alegraremos de la gratificación moral de la pureza.
En consecuencia, hijos míos, estemos atentos a nosotros mismos, cuando aparezcan pensamientos malos. No importa de qué se traten: si la mente no está atenta, ellos entran y crean, de acuerdo a nuestras debilidades, un estado insano. ¡Lo único que puede salvarte es la vigilia permanente! La vigilia (nepsis), es decir, el permanecer atentos, vigilantes, despiertos, es algo beneficioso, porque si la practicamos, la casa de nuestra alma se mantendrá siempre a resguardo y podremos salvar nuestra alma, que es el objetivo final de nuestra lucha en esta vida.
(Traducido de: Arhimandrit Efrem Filotheitul, Comori duhovnicești din Sfântul Munte Athos – culese din scrisorile și omiliile Avvei Efrem, Editura Egumenița, Galaţi, p. 26)