Palabras de espiritualidad

Cuándo llegará el momento de responder ante nuestro Juez

    • Foto: Oana Nechifor

      Foto: Oana Nechifor

El más terrible tormento del infierno es comprobar qué consecuencias tuvo cada uno de tus pensamientos, tus palabras y tus actos.

De acuerdo a la enseñanza de la Iglesia, dos juicios hay: el primero, “particular” o individual, que tiene lugar después de morir, a los cuarenta días; y el otro, “universal”, cuando la historia entre en la plenitud de la Revelación. La Ortodoxia, sobre todo, considera que el intervalo entre el juicio “particular” y el juicio “universal” representa una posibilidad real de salvación para las almas, por medio de la comunión con la Iglesia, sus oraciones y las de todos los cristianos. Y entonces, en el juicio universal, responderemos por todos nuestros actos y sus efectos en la historia. Verdaderamente, el más terrible tormento del infierno es comprobar qué consecuencias tuvo cada uno de tus pensamientos, tus palabras y tus actos; ver cómo muchos de ellos sacaron a algunas personas de la albura del bien, arrojándolas al abismo y a las profundidas de las iniquidades. Entonces no te quedará más que reconocer “sí, yo soy el culpable, yo soy quien originó todo eso”.

(Traducido de: Părintele Constantin Galeriu, Dialoguri de seară cu Andrei Pleșu, Gabriel Liiceanu și Sorin Dumitrescu, Editura Harisma, București, 1991, pp. 113-114)