Palabras de espiritualidad

De por qué es importante tener un corazón puro

  • Foto: Bogdan Zamfirescu

    Foto: Bogdan Zamfirescu

Lo que otros desean alcanzar con la pureza del cuerpo, nosotros estamos obligados a tenerlo bajo control, en las partes más ocultas de nuestra conciencia.

Lo primero que hay que hacer es limpiar con todo cuidado lo que hay oculto en nuestro corazón. Ciertamente, lo que otros desean alcanzar con la pureza del cuerpo, nosotros estamos obligados a tenerlo bajo control, en las partes más ocultas de nuestra conciencia. Mientras “el fuerte”, es decir, nuestro espíritu, “cuida su casa con el arma preparada”, fortaleciendo lo que tiene en su corazón con el temor de Dios, “su riqueza está bien resguardada” (Lucas 12, 21), es decir, “los frutos de su esfuerzo y las virtudes alcanzadas con el tiempo”.

Si queremos echar de nuestro corazón los apetitos de la carne, tenemos que sembrar en su lugar, inmediatamente, los placeres espirituales, para que nuestra alma tenga en dónde morar, rechazando las redes de las bondades presentes y pasajeras. Cuando nuestra mente, con el ejercicio constante y diario, alcanza dicho estado, con la ayuda de la experiencia puede hacerse consciente del contenido de aquel versículo que todos cantamos, pero que pocos entendemos: “Tengo siempre al Señor en mi presencia, lo tengo a mi derecha y así nunca tropiezo”.

(Traducido de: Sfântul Ioan Casian, Virtutea curăției și a castității - biruitoare a patimii desfrânării, Editura Trinitas, Iași, 2003, p. 17)