De un conocido escritor ruso que murió siendo un cristiano verdadero
“¡Cuánto he perdido! ¡Es terrible! ¡He perdido mucho!”. “¿Qué perdiste? ¿Por qué lo perdiste?”. “Por no haberme hecho monje…”
El stárets Macario se hallaba en un nivel muy alto, en lo que respecta al don de la palabra, y sus homilías y prédicas ejercían una gran influencia sobre el alma de quien le escuchaba. Después de haber visitado al stárets, (el escritor ruso, Nicolái) Gógol dijo: “Sí, me dijo la verdad. De todas las personas que conozco, él es el único que tiene el poder de conducirte a los manantiales de agua viva”. Y después reconoció: “Cuando salí de hablar con el stárets, yo era una persona distinta a la que entró”. Y Gógol murió siendo un cristiano verdadero. Se sabe que, no mucho antes de morir, le dijo a su mejor amigo: “¡Cuánto he perdido! ¡Es terrible! ¡He perdido mucho!”. “¿Qué perdiste? ¿Por qué lo perdiste?”. “Por no haberme hecho monje… ¡¿Por qué el padre Macario no me llevó con él a la skete?!”.
(Traducido de: Patericul de la Optina, traducere de Cristea Florentina, Editura Egumenița, Galați, 2012, pp. 387-388)