Palabras de espiritualidad

¡Dejen que los niños vengan al mundo!

  • Foto: Oana Nechifor

    Foto: Oana Nechifor

Translation and adaptation:

¿Para qué empezar a tener hijos desde el primer año de casados? ¡Ya habrá tiempo para ellos, ahora lo que corresponde es vivir la vida!” Pensando así no hacemos sino abrir una vía al pecado y a toda clase de problemas, que inevitablemente empezarán a aparecer.

Ustedes, jóvenes, principiantes en la vida, suelen pensar, “¿Para qué empezar a tener hijos desde el primer año de casados? ¡Ya habrá tiempo para ellos, ahora lo que corresponde es vivir la vida!” Pensando así no hacen sino abrir una vía al pecado y a toda clase de problemas, que inevitablemente empezarán a aparecer. Entonces, para no empezar mal y para no verse en la situación en la que ya nada puede hacerse, inicien todo bien, precisando claramente su posición espiritual en referencia a los frutos que la Iglesia bendice del matrimonio, los hijos. Ellos son el fruto del amor; luego, evitarlos no es amor, sino un crimen. La búsqueda del simple placer, evitando el propósito natural del instinto, es vicio y pecado, siendo castigado por la Ley que norma al hombre.

(Traducido de: Arhimandrit Arsenie Boca, Tinerii, familia și copii născuți în lanțuri, Editura Credința strămoșească, 2005, p. 33)