El agradecimiento es un deber de todo cristiano
Simplemente, que cada uno de tus movimientos sea motivo para alabar a Dios.
Todos los cristianos estamos obligados a agradecerle a Dios, porque está dicho: “Agradezcan por todo”. De aquí llegamos a otra palabra del Apóstol, quien dice: “Oren sin cesar”, es decir que debemos mencionar el nombre de Dios a cada instante, en cada lugar y en cada cosa que hagamos.
Porque sea lo que sea que haga el hombre, está obligado a mencionar a Quien todo. Por ejemplo, cuando veas la luz, no olvides Quién te la otorgó; cuando veas el cielo y la tierra, el mar y todo lo que existe, glorifica y alaba a Aquel que lo hizo; cuando te vistas, acuérdate de Ése que te da todo y cuida de tu vida.
Y, simplemente, que cada uno de tus movimientos sea motivo para alabar a Dios; así es como estarás orando sin cesar, haciendo que tu alma se alegre siempre.
(Traducido de: Sfântul Petru Damaschin, Învăţături duhovniceşti, traducere, introducere şi note de Pr. Prof. Dumitru Stăniloae, în „Filocalia”, vol. V, Editura Institutului Biblic și de Misiune Ortodoxă, Bucureşti, 1976, pp. 147-148)