Palabras de espiritualidad

El amor saca lo mejor de nosotros

  • Foto: Stefan Cojocariu

    Foto: Stefan Cojocariu

Ningún asceta se santificó sin esfuerzo. Nadie ha conseguido un alto nivel espiritual sin aplicarse. Debe existir esfuerzo. Y todo debe hacerse con alegría.

No se harán santos cazando al mal. Dejen el mal en paz. Dirijan su mirada a Cristo y Él los salvará.

Lo que santifica al hombre es el amor, la glorificación de Cristo, que no se puede expresar en palabras, simplemente no se puede… Porque el hombre se esfuerza en todo tipo de afanes, extenuándose para alcanzar el amor de Dios.

Ningún asceta se santificó sin esfuerzo. Nadie ha podido alcanzar un alto nivel espiritual sin aplicarse. Debe existir esfuerzo. Y todo debe hacerse con alegría. Esforzarse es hacer postraciones, vigilas y tareas semejantes, con sinceridad, no de forma forzada. Todo debe hacerse con alegría. No importa tanto cuántas postraciones hagamos, cuántas oraciones, sino la entrega que pongamos, el amor a Cristo, a las cosas espirituales. Hay muchos que hacen todo esto, no para Dios, sino para su beneficio físico, aunque las personas espirituales lo hacen para beneficio de su alma, para Dios. Pero también el cuerpo se beneficia, deja de enfermarse. Ciertamente, empiezan a venir incontables frutos.

(Traducido de: Ne vorbeşte părintele Porfirie – Viaţa şi cuvintele, traducere din limba greacă de Ieromonah Evloghie Munteanu, Editura Egumeniţa, 2003, p. 262)