¿El matrimonio religioso es un simple requisito o un Sacramento para la eternidad?
El matrimonio religioso no es una simple “superstición” que debe respetarse para que a los nuevos esposos todo les salga bien en su vida conyugal, sino que se trata del elemento esencial sin el cual la boda no es más que una fiesta entre amigos y familiares. La bendición que reciben los novios en el Sacramento del Matrimonio, los une para la eternidad.
Muchas personas no son conscientes del carácter sacramental del matrimonio. Veamos, por ejemplo, lo que sucede en muchas bodas: el novio sonríe, la novia le pisa el pie sin querer, los padrinos vienen vestidos de forma indecente y ni siquiera saben cómo actuar en la ceremonia, no viven el momento... ¡Ninguno entiende en qué están participando!...
Creo que la culpa de esto es tanto de nosotros, los sacerdotes, porque no catequizamos correctamente a los novios, a los padrinos y a los demás; no los ayudamos a concientizar la importancia de este Sacramento. Y es culpa de ellos también, porque no les interesa entender cómo funcionan las cosas de Dios, que no se asemejan en nada a las de este mundo.
(Traducido de: Părintele Nicolae Tănase, Soțul ideal, soția ideală, Editura Anastasis, 2001, p. 109)